El Desafío del Malvavisco no cumple: existen mejores alternativas
Me encantan las Charlas TED. Me encantan las actividades de aprendizaje experiencial. Ambas tienen un enorme potencial para generar aprendizajes profundos y desafiantes. Así que podrías pensar que disfrutaría de una charla TED sobre aprendizaje experiencial… pero me decepcionó ver esta presentación del Desafío de la malvavisco.
No cumple con lo que promete. Aquí está la razón…
¿Qué es el Desafío del Malvavisco?
En esta versión (y existen muchas variantes – como el nuestro, que hemos ajustado para que sea realmente efectivo), varios equipos de cuatro personas compiten para construir la torre más alta posible usando una cantidad limitada de espaguetis crudos, cinta adhesiva y cuerda, en 18 minutos. La estructura terminada debe sostener un malvavisco en la cima y ser completamente independiente. El equipo con la torre más alta y legal gana.
Como puedes imaginar, es una actividad memorable y atractiva. Es divertida y genera un gran entusiasmo. No es sorprendente que muchos profesionales de Formación y Desarrollo la utilicen; reciben buenos comentarios de los participantes que disfrutan del juego. Pero, ¿obtienen realmente buenos resultados?
La actividad en sí está centrada en la tarea. Es fácil medir el éxito. No importa cuán complejas sean las interacciones del equipo, o incluso las estructuras de espagueti, el equipo que mejor rinde es el que construye la torre más alta.
Las instrucciones básicas para ejecutar esta actividad son:
Repartir los materiales
Leer las reglas 3 veces
Decir “¡ya!” y, 18 minutos después, decir “¡alto!”
Medir la torre más alta y declarar a los ganadores
Mostrar las diapositivas de la presentación TED sobre el estudio de esta actividad
Lo que promete versus lo que realmente entrega
Se hacen varias afirmaciones sobre los beneficios de esta actividad de equipo y los hallazgos del estudio, tanto en la charla como en línea. Entre ellas:
“Lecciones profundas sobre la naturaleza de la colaboración” – pero no hay ninguna
La colaboración efectiva es un tema enorme con gran potencial para aprendizajes profundos. Pero la única lección mencionada es que los graduados de escuelas de negocios parecen gastar demasiado tiempo compitiendo por poder. No queda claro qué información práctica obtienen los participantes. El enfoque está en completar la tarea, no en analizar la dinámica del equipo ni el impacto de cada individuo en el rendimiento. Esto es una oportunidad perdida para un aprendizaje enriquecedor.
“Ayuda a identificar supuestos ocultos” – para algunas personas, en algunos momentos
Al final de esta actividad, la torre de espagueti suele verse bien hasta que se coloca el malvavisco en la cima, momento en que la estructura colapsa. Debido a un falso supuesto de que el malvavisco es ligero, el equipo no completa la tarea. Así, “el malvavisco” se usa como metáfora para mostrar cómo los supuestos falsos nos hacen tropezar.
Pero hay dos problemas con esta metáfora:
Si la actividad está diseñada para generar el mismo resultado siempre, no conduce a un verdadero descubrimiento personal. Solo es una actividad que te prepara para fallar y enseñar una lección predeterminada. El aprendizaje experiencial puede ser mucho más abierto, llevando a conclusiones inesperadas y personales.
Existe un sesgo técnico en la actividad, reconocido en la presentación: los ingenieros y arquitectos construyen torres consistentemente más altas que los demás grupos y que no se caen al añadir el malvavisco. No caen en la trampa del supuesto oculto porque conocen estructuras de carga, no porque nunca hagan suposiciones falsas. En otras palabras, la metáfora tampoco funciona para ellos.
“Demuestra que prototipar es clave para el éxito” – una lección sin contexto
La presentación concluye que el alto rendimiento de niños de 5 o 6 años se debe principalmente a su propensión a jugar, lo que los lleva a prototipar desde el inicio. En el contexto de este juego, es un punto interesante. Pero ignora su falta de planificación y los riesgos que esto supondría en un entorno organizacional real, donde los recursos no son finitos ni predeterminados. La actividad está tan alejada de la mayoría de tareas reales que cualquier aprendizaje es limitado. Otra oportunidad perdida.
“Demuestra que las habilidades diversas importan” – pero no se centra en la diversidad del equipo
La presentación menciona que los ejecutivos senior mejoran su desempeño al añadir administradores a su equipo, supuestamente como facilitadores de los ejecutivos orientados a la acción. Esto resalta el poder de la facilitación efectiva.
Pero observar los resultados de otro equipo es un error. ¿Por qué no enfocarse en la diversidad de tu propio equipo, explorando las distintas personalidades y rasgos? Valorar la diversidad interna haría que la actividad fuera mucho más enriquecedora.
No todo son malas noticias: consejos para mejorar
¡Basta de crítica! El Desafío del Malvavisco puede mejorarse; simplemente tiene limitaciones, especialmente si no se facilita bien. Si solo buscas un rompehielos o un ejercicio básico para fomentar creatividad, innovación o principios de ingeniería, puede cumplir su propósito.
Si deseas que represente un verdadero aprendizaje experiencial, puedes obtener insights más amplios cambiando el formato y enfoque:
No muestres la presentación. Sí, es divertida y tiene aprendizajes inesperados, pero poco prácticos. Lo peor es que presenta lecciones predeterminadas, “una talla única”. Pero una talla no sirve para todos. Puedes hacer mucho más que enseñar a construir mejores torres de espagueti.
Haz el aprendizaje personal. Centrar la atención de los participantes en su desempeño y contribución al equipo permite extraer lecciones profundas sobre colaboración. Incluso quienes sobresalen pueden reflexionar sobre mejoras en su comportamiento para rendir mejor en el futuro. Imagina el impacto de este enfoque en una organización.
El siguiente nivel…
Por sus reglas simples y componentes limitados, el Desafío del Malvavisco solo desbloquea un pequeño porcentaje del potencial de aprendizaje experiencial. Para generar cambios reales, necesitas actividades con instrucciones más complejas o ambiguas y resultados inciertos, como las del MTa Insights kit. Así aseguras que cada persona obtenga aprendizajes relevantes, sin importar su seniority o experiencia. Los facilitadores deben guiar cuidadosamente la reflexión y contextualizar el aprendizaje.
Y para cerrar con broche de oro, crea un entorno seguro y una actividad que permita poner a prueba los comportamientos aprendidos antes de implementarlos en el trabajo diario.
Visto de esta manera, coincidirás conmigo en que el mejor uso para un malvavisco es… tostarlo suavemente sobre el fuego.
Imagenes sugeridas en el original:
Malvaviscos quemándose, simbolizando la necesidad de métodos de aprendizaje experiencial más profundos y efectivos.
Participantes usando MTa Insights kit en un Masterclass para mejorar el aprendizaje experiencial.
